antes: lo que vale la pena
Una cosa fue clara: tenía que no esconderme más. No reprimirme, no fingir, no hacer lo que no quiero hacer. No ser sumisa.
Así las cosas se fueron aclarando de a poco...
¿Quién soy?
Soy una persona única.
Soy alguien que se equivoca a menudo (más de lo prudente), pero que es capaz de aprender de las equivocaciones.
Soy flexible, me opongo a aquello obstinado, intransigente o voluntarioso. No niego que a veces he sido aquello que me disgusta... pero no quiero ya odiarme más, quiero que ese pensamiento me impulse a mejorar como persona. Por eso trato de estar con la mente abierta y sensible a escuchar otras ideas.
No soy pertenencia de nadie, pertenezco a mí misma. Pero soy capaz de compartir mi vida con personas que amo.
Me preocupo cuando veo sufrir a alguien. Aún más si yo soy la causa. Me propongo hacer lo que me sea posible para detener ese sufrimiento.
Soy enojona, exploto fácilmente.
Soy cobarde, evito los conflictos hasta que es demasiado tarde.
Soy curiosa, me gusta entender y darle vueltas a las cosas, hasta saciar mi hambre de respuestas.
Estoy vertida hacia adentro. Me quedo con mis sentimientos a solas y los analizo con violencia. No los comparto con cualquiera. Sólo los comparto con aquellos que creo que sabrán escuchar, apreciar y aceptarlos.
Yo soy una persona y merezco respeto, y tengo el deber de respetar a otros.
¿Qué es lo que quiero?
Quiero ser yo misma y vivir mi vida. Quier cometer mis propios errores. Sufrir y/o reír cuando sea necesario.
Quiero estudiar y trabajar. Quiero aprender y saciar mi curiosidad de vida.
Quiero recibir lo que me de la vida y arreglármelas lo mejor posible con lo que tengo.
Quiero ser aceptada y comprendida, respetada a pesar de mis defectos.
Pero no quiero ser juzgada. Quiero construir yo misma mi vida y compartirla, pero no quiero que alguien pretenda construir mi vida en mi lugar.
jueves, 25 de agosto de 2011
lo que vale la pena
Palabras... para mí son como agujas (o espadas) de hielo. Me hieren a mí y, lo que es peor, hieren a otros.
A veces logro controlarlas, a veces no.
El asunto es que esas palabras desbocadas me han empujado a la situación actual... y debo hacer algo antes de que sea demasiado tarde (siento que voy corriendo contra el reloj).
No para justificarme, pero para desahogarme, explicaré mi historia:
Hace poco me fui de viaje. La idea era conocer lugares, sabores, colores, gente nueva... Pero para mi sorpresa conocí algo aún más importante: me conocí a mi misma.
Supe quien era yo. Mejor dicho, acepte a mi yo que siempre había llevado conmigo, pero que había ignorado por mucho tiempo.
Sin embargo, esta yo se encontraba más confundida que nunca. Dado que no era la misma de antes, ¿cómo se supone que debía actuar ahora? ¿cuál el camino a seguir?
Volví de mi viaje y mis dudas se acrecentaron ¿qué es lo que quiero? ¿qué es lo que no quiero?
A veces logro controlarlas, a veces no.
El asunto es que esas palabras desbocadas me han empujado a la situación actual... y debo hacer algo antes de que sea demasiado tarde (siento que voy corriendo contra el reloj).
No para justificarme, pero para desahogarme, explicaré mi historia:
Hace poco me fui de viaje. La idea era conocer lugares, sabores, colores, gente nueva... Pero para mi sorpresa conocí algo aún más importante: me conocí a mi misma.
Supe quien era yo. Mejor dicho, acepte a mi yo que siempre había llevado conmigo, pero que había ignorado por mucho tiempo.
Sin embargo, esta yo se encontraba más confundida que nunca. Dado que no era la misma de antes, ¿cómo se supone que debía actuar ahora? ¿cuál el camino a seguir?
Volví de mi viaje y mis dudas se acrecentaron ¿qué es lo que quiero? ¿qué es lo que no quiero?
lunes, 30 de mayo de 2011
miércoles, 20 de abril de 2011
feliz
¿por qué de repente me siento tan feliz?
¿Taaaaaan feliz?
Lo curioso es que no estoy feliz por mi, sino por los demás. Cuando veo que la gente buena recibe lo que se merece, me siento feliz. Pareciera que, aunque no sea muy a menudo, el mundo se encarga de darle cosas buenas a los que se lo merecen...
Me alegro por mis amigos, por mis conocidos, y por todos aquellos que hicieron algo bueno y fueron recompensados.
La mayor parte del tiempo la vida parece ser terrible e injusta. Pero unos momentos de felicidad son suficientes para soportar los malos tiempos (eso espero).
¿Taaaaaan feliz?
Lo curioso es que no estoy feliz por mi, sino por los demás. Cuando veo que la gente buena recibe lo que se merece, me siento feliz. Pareciera que, aunque no sea muy a menudo, el mundo se encarga de darle cosas buenas a los que se lo merecen...
Me alegro por mis amigos, por mis conocidos, y por todos aquellos que hicieron algo bueno y fueron recompensados.
La mayor parte del tiempo la vida parece ser terrible e injusta. Pero unos momentos de felicidad son suficientes para soportar los malos tiempos (eso espero).
lunes, 4 de abril de 2011
viernes, 1 de abril de 2011
limpieza de mail
...mueve piezas olvidadas dentro de mí.
Piezas pequeñas y grandes, circulares e irregulares, fugaces o permanentes.
Las piezas formaban un mosaico
algunas aún están
otras
desaparecieron
se borrar o n
des per
di
ga das
por el pasado.
Piezas pequeñas y grandes, circulares e irregulares, fugaces o permanentes.
Las piezas formaban un mosaico
algunas aún están
otras
desaparecieron
se borrar o n
des per
di
ga das
por el pasado.
jueves, 24 de marzo de 2011
lo que ella dijo...
El domingo pasado tuve la oportunidad de conversar con una canadiense-canadiense hasta las patas. Es la "amiga" de uno de mis roommates (el Francisco). Y digo "amiga" entre comillas porque lleva una semana (o más) durmiendo con él.
En fin, la conversación tiraba al tema del matrimonio, y pude conocer un punto de vista digamos que muy "norteamericano". Sus ideas eran más o menos así:
ojo, escribo lo que ella dijo, independiente de que esté de acuerdo o no.
1) "Antes de casarte, debes experimentar lo más posible con la mayor cantidad de gente posible". Sus argumentos se basaban en la idea de que si te casas muy joven, no logras formar tu propia personalidad, que se verá inevitablemente afectada por la pareja. De acuerdo a su pensamiento, si estás con muchas parejas, puedes aprender un poco de cada relación y así forjar tu propia personalidad... además de descubrir que cosas son las que quieres (en tu pareja). Ella sostenía que mientras más tarde te cases, menor es la probabilidad de divorciarse.
2) "No es bueno permanecer en una misma relación por mucho tiempo". Por los mismo motivos que antes, es decir, tu persona es afectada por la pareja. Además, argumentó, si estás con una persona puedes perder de vista a las otras opciones que pasan a tu lado (y que pueden ser mejores que la opción actual).
3) "La persona que amas no es necesariamente aquella con la que te debes casar". Claro, porque esa persona que amas puede que no te convenga... Pero ojo: la persona con la que te cases, debes amarla.
Básicamente, sus ideas son los exactos opuestos de mis ideas...
Escucharla me causo cierto shock y repulsión -no puedo negarlo-, y más aún porque no son sólo sus ideas sino las de toda una sociedad.
Mi primera reacción es que me da pena ver que haya gente que piense de ese modo, porque de acuerdo a mi punto de vista, es algo que los llevará a sufrir.
Luego pienso que por qué iba a ser mi punto de vista mejor que el de ellos... Cada uno debe hacer lo que considere correcto para sí mismo.
Pero no puedo evitar querer refutar sus ideas, hacerle notar que está equivocada, cambiar su punto de vista.... y si no cambia, en el futuro ver que sufre y decirle: "te lo dije"...
Necesito refutar sus ideas para quedar tranquila con mi conciencia, y no necesariamente refutarlas con argumentos lógicos pero con mis propios sentimientos e ideas:
1) "Antes de casarte, debes experimentar lo más posible con la mayor cantidad de gente posible". En cierta medida, pienso que es bueno experimentar algunas cosas antes de casarte: estudiar, trabajar, viajar, tener un par de pololos... Pero todo con moderación, creo que demasiadas relaciones no serias te llevan a un vacío y a una falta de motivo para vivir (sí, yo creo que amar es una de las razones para vivir).
Luego está lo de: "si te casas muy joven, no logras formar tu propia personalidad, que se verá inevitablemente afectada por la pareja". Claramente debes formar tu propia personalidad, pero ¿acaso no será siempre esta influenciada por los demás?. Yo sé porque lo experimento en mi vida: mi familia y amigos contribuyen a forjar mi personalidad. Entonces, ¿porqué no iba a querer compartir eso con la persona que amo?
Por último, "descubrir que cosas son las que quieres (en tu pareja)"... Creo que a veces es necesario ceder con las cosas que quieres... porque no existe una persona en el mundo que tenga exactamente todo lo que buscas en una pareja. Si tu pareja tiene la mayoría de las cosas, genial, pero hay que ser realista y darse cuenta de que todos tienen defectos, y tendrás que tolerarlos, así como los demás toleran los tuyos. Esa es la gracia de amar, ¿cierto? el poder aceptar ciertos defectos de alguien porque lo amas, y es valido también para otros tipos de relaciones como padres-hijos o entre amigos...
2) "No es bueno permanecer en una misma relación por mucho tiempo". y "si estás con una persona puedes perder de vista a las otras opciones que pasan a tu lado". ¡Que comentario tan frío! Suena como que no amas nunca a la persona con la que estas, sino que sólo buscas a aquella que te conviene... Para mí, alguien que me conviene es alguien que me ame, me respete, y que tenga pensamientos similares e intereses comunes conmigo... si tengo todo eso en la persona que amo, ¿por qué tendría que estar pendiente de los otros hombres que pasen a mi lado? La única respuesta que se me ocurre es que: no lo amo de verdad, luego, llego a una incongruencia porque, ¿por qué iba a estar con alguien que no amo?
3) "La persona que amas no es necesariamente aquella con la que te debes casar". Es más o menos lo mismo que el argumento anterior...
Definitivamente, este pensamiento gringo no es para mí. ¿Qué opinan uds?
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